Dos razones para matarte y una para darme dinero. [Libre]

Sunshine... Ya ha pasado mucho desde el día en el que me aloje en este sitio. Tantos objetivos en esta ciudad pero ninguna llevada a cabo. Bueno, en fin, veremos que podemos hacer ya que me he puesto las pilas. Aunque por otra parte, los mafiosos de hoy en día me están poniendo enferma, voy a una panadería? Hala, extorsión. Voy a un bar? Muy bien, Tinglado. Estancia para dormir? El precio se ve muy caro. Por que? Pues por que la mafia ha doblado el precio... O sea, vas en serio? Me tienen un poco hasta los ovarios de que haya mucha mafia amargándome la vida, vale de que esto sea The Hole pero tampoco se pasen de degenerados! Ay... En fin, necesitaré un trago de leche para quitar mis penas... Camine y camine para encontrar alguna que otra cafetería, en la que por suerte, encontré una en la plaza de la ciudad. Me senté en una de las mesas que había afuera esperando a que me atendieran hasta que... Un grupo de pandilleros me volcaron la mesa a propósito solo por que estaba en su camino... Tch! Malditos pandilleros, hoy no tienen respeto por nada.

-Eh! Anormal! Por lo menos pide disculpas!-

Entonces esos macarras se acercaron a mi con miradas violentas y sus pasos de pandillero, acercándose uno de ellos para hablarme de frente a frente e intentando intimidarme como si le tuviera miedo o algo.

-Eh! Zorra! Me la suda un huevo lo que pienses, hago lo que se me de la gana! Entiendes hermana? HE DICHO QUE SI ME COMPREN-!-
*BANG!*

Ya no aguantaba mas, el gitano este me estaba duchando de saliva mientras hablaba en plan pandillero y gritándome a todo volumen, así que le cerré la boca poniendo mi "Pipa" en su boca y acabar con su miseria, haciendo que me salpicara de sangre a mi y a los demás macarras del grupo. Entonces, miré a su cadáver chorreando de sangre antes de que mirar a su pandilla mientras que estos se sentían intimidados.

-Te entiendo... Hermano. Y ahora por ducharme te has ganado un billete gratis al cielo. Eh eh eh eh~! A donde os creéis que vais?-

Pregunté mientras les apuntaba a punta de pistola y ellos levantaban las manos o se quedaban quietos y muertos de miedo.

-Que ha pasado con el respeto hermanos? O sea, me venís aquí a amargarme la vida y no pedir disculpas? Mira por mi os dejaría ir, pero como veo que os gusta perjudicar al prójimo pues... Nada os dejaría ir.-

Entonces le disparé a uno en la pierna y a otro en el brazo haciendo que agonizaran de un dolor intenso... No sé creo que uno de ellos estaba llorando o algo.

-Os dejaría ir pero estoy tan cabreada con vosotros que me gustaría dispararos a saco y mataros de uno en uno jugando a la ruleta rusa. Peeero, podre perdonaros si me pagáis. Cuanto dinero tenéis en el monedero?-

Y mientras tanto, buscaba sus monederos mientras apuntaba a punta de pistola. Una cosa que aprendí de mi familia era algo como... "Para ganarse la vida, hay que robar carteras". Eso era mas o menos equivalente a matar gente, pero como intento perdonarles la vida con dinero pues podría decirse de que estoy "Salvando vidas". Que podría decir, estoy en un lugar lleno de criminales, aquí como que carecen mucho de bondad, por lo que es una lastima me habría encantado jugar a las casitas y tomar té imaginario con peluches fingiendo ser personas... Tiempos aquellos en Pandora, al menos teníamos respeto mutuo... Casi suicida y psicópata, pero respeto mutuo si que había.

La ciudad de la penumbra, donde la misma escoria mandaba a sus personajes ejemplares; aquel lugar donde la mierda de la mierda caía sobre las cloacas, solo para nadar en la inmundicia de su misma corrupción. Era trágico, era trágico mirar todo aquel panorama, pero en fin él era la muerte, el segador. No había siquiera por que llorar pues, para el todo aquello era como un parque de diversiones. Una atracción por aquí, otra por allá. En fin, era divertido mirar como convivían aquellos seres en el basto patio de juegos. Era una mansión disfrazada de prisión, un verdadero salón de la fama para todo aquel que viviese en sunshine. Ahí simplemente iba la gente que había logrado traspasar la muralla de lo correcto a lo normal en aquel nuevo mundo. Aun así, nada evitaría que él se hiciese con las almas de aquellos impuros.
Su cuerpo se desplazaba sobre la acera en busca de algo que proteger, en busca de algo a quien arrestar, pero solo se topaba con insectos menores. Escorias que no valía la pena siquiera detener para reconocer. Solo sombras que desaparecían entre la penumbra de sus nombres, entre la sombra que proyectaban los grandes, algunos de tal magnitud, que eclipsaban por completo la ciudad. Eran aterradores dichos individuos, pero dudaba encontrarse con alguno en aquel lugar.

La noche se mantenía sobre aquel lugar, dándole un diferente contraste a la sangre que incluso, en algunos tamos, se encontraba ya seca sobre el pavimento. Era brutal lo que ahí pasaba, lo que ahí se hacía ver. A veces las personas más bajas en la cadena, son los que más daño causan. Todo por sobresalir, sobresalir de la manera menos idónea. Ellos merecían morir de una manera horrible, y no de la manera más idónea, como solo él lo podía otorgar. Sus ojos se posaron a un costado mientras un lloriqueo le hacía estragos la cabeza.

Joder, ni las mujeres están exentas de esto –Grito mientras, colocaba su capucha sobre su cabeza. La imagen era primero, y vaya que aterraba su imagen original. De su espalda brotaron un par de alas negras, semejantes a las de un cuervo las cuales le extendieron de lado a lado. Sus ojos se posaron en su objetivo y, de un simple impulso, aquel ser se lanzó sobre aquella chica en la cafetería. No podía permitir que la gente tomara justicia por sus propias manos, aun que en verdad, se lo merecieran.

Mientras les "salvaba" de una muerte segura, vi cuanta cantidad de dinero, que a lo mejor era robado. Del cadáver no vi nada, pero de los otros dos, uno estaba mas forrado de carteras que de niñato rico, el otro de dinero no tenía ni media, así que era un fastidio.

-Me estáis vacilando? Sois macarras de toda la vida y eso es lo que podéis robar? Nenes, una rata sabe robar mejor que vosotros y eso que no tienen trabajo. Pero en fin...-

Contaba la cantidad de dinero que llevaba mientras disparé de nuevo al que iba sobrado de dinero en otra pierna, por que bueno, le disparé en la pierna anteriormente así que mejor fastidiarle la otra pierna y dejarlo sin piernas. Y bueno, la cantidad de que les había robado era suficiente para comprarse la cena. Entonces se me apareció como una especie de hombre murciélago o algo así y se lanzó sobre mi como si fuera una especie de criminal de los Cómics o algo así, aunque claro yo me aparté antes de que me hiciera algo. Hmm... No sé, creo que había oído algo de un Dios de la Muerte o algo así en Sunshine, pero no me lo creí. Ahora que lo veo fijamente pensé "Ostras es el!" Así que le pregunté tranquilamente a ese "señor" algunas dudas que tengo hoy mientras estoy apuntando a punta de pistola a los pandilleros que aún seguían por aquí.

-Hey tío mas cuidado con volar en un lugar cerrado! En fin... Ya que estás aquí, cuanto dinero tienen que pagarme para salvarse a ellos mismos?-

Pregunté aquel hombre sin saber que a lo mejor es una persona que podría degollarme y dejarme al suelo sin apenas darme cuenta. O bueno, son paranoias mías y a lo mejor es amigable. Como todos los de Pandora cuando una banda de pseudo-irlandeses me metieron una escopeta por el $@%4 y tuve que mear perdigones toda una semana por que los muy genios se les ocurrió apretar el gatillo y... No queréis saber lo que pasa después de lo que acabo de decir... En fin, en ese momento me encontraba con una persona bastante curiosa y a la vez da un aire de peligro que daban ganas de salir pitando leches de aquí, pero claro no lo hice, o por que soy masoquista o por que tengo la extraña costumbre de meterme en líos y acabar lisiada en un cubo de basura, ambas cosas son aceptables pero claro son cosas que pasan en mi día diario.

Off: perdon la tardanza, anduve algo ocupado con la uni

Sus ojos se posaron sobre la chica de aspecto extraño. No podía entender con qué tranquilidad se mantenía aun estática en el mismo lugar que se encontraba. Como podía siquiera mantenerse con la misma mirada, inexpresiva ante la sorpresa de aquel ente, sobre su extraña interrupción, sobre sus palabras ¿Qué coño le pasaba a esta maldita? En verdad no lo comprendía. Giro su cuerpo en dirección a ella, quedando así de frente ambos. Los escombros ahí caían sobre los inertes cuerpos de algunos damnificados por su entrada. Nada que fuese algo serio, simples golpes y raspones que, al cabo de una semana, terminarían por ser simplemente recuerdos de su persona. Algunas manos se sacudían frenéticamente en el suelo, tratando así de salir de aquellos escombros, arrastrándose para suplicar una ayuda por parte de aquel ente. Pero siquiera prestaba atención a los demás, simplemente a quien tenía enfrente- ¡No me jodas maldita, al menos parpadea, suspira, tírate un pedo no sé, has algo! –Grito. La desesperación que le hacía sentir aquel personaje era evidente, y en parte sin fundamentos. Solo el hecho de la falta de reacción en aquella mujer. Odiaba ser ignorado.

No puede ser posible que alguien entre como si nada en un lugar, rompa todo y encima sea la muerte para que ¡TU! Maldita niñata, solamente te dignes a seguir como si nada –No podía ocultar su sentir, aquella persona le hacía hervir la sangre incluso antes de conocerle. Parecía que le valía un carajo la vida, siempre y cuando esta le diese algo de plata. Pero no podía hacer nada más que gritar y despotricar hasta el mismo cansancio pues, de no hacerlo terminaría quebrantando la más importante- No mataras – Odiaba esa parte del contrato, no lo podía negar. Y sin sospecharlo, un sonido llamo la atención del pelinegro. Un sujeto se levantaba de entre los escombros con una mirada de horror en su rostro. Sus manos temblaban estrepitosamente ondeando un enorme tubo en su mano derecha. Sin pensarlo dos veces, más que por el simple miedo que se veía le manipulaba, soltó un golpe en dirección a Dead quien sin esfuerzo alguno, estiro su brazo derecho hacia aquella barra tomándola en el aire. Sin voltear, este doblo aquel fierro como si fuese una simple pajilla, sin siquiera prestar atención mientras su cabeza se convulsionaba de la ira.-Has elegido un mal momento –Dijo al tipo; acto seguido, cerro su puño izquierdo y girando su torso a medias, propino un puñetazo en el rostro del malviviente.

Vaya... No sé que le pasaba a este tipo, viene como si fuera un avión a punto de estrellarse y ahora por hablarle se cabrea conmigo... Pero que le pasa?! Apenas he dicho algo, solo le he preguntado algo simple y para romper el hielo, y madre mía como se puso, como si me estuviera juzgando ahora mismo. Miro a mi alrededor y veo que todo está destrozado (Cosa que ahora me doy cuenta), que hasta los pandilleros que tenía como rehenes se habían ido a tomar culo. Bueno... No solo eso... También me ha destrozado la cafetería... Viendo esa escena me giré y le hablé a aquel tío que solo se dedicó a destruir un lugar solo por que si.

-Se puede saber que mosca te ha picado?-

Entonces me siguió gritando de que era la muerte y no sé que mas. Hasta me insultó llamándome "niñata". O sea... NIÑATA YO?! O sea, se cabrea conmigo solo por mirarle y ahora me llama niñata?! Yo no entiendo a la gente de este sitio en serio... Me cabreó muchísimo oír eso, así que me puse al frente sin miedo y le contesté de la mejor manera posible...

-Y TU A QUIEN LE LLAMAS NIÑATA VIEJO!! Yo que te he hecho para que te pongas así Señor Muerte?! Ni que esto no pasara todo los días! . . . No pasa verdad...?-

En mi caso desde que pisé la ciudad me ido a lugares donde no debería estar ya que, debido a mi mala suerte... Mi extrema mala suerte, siempre me encuentro con problemas en la que una persona normal llegaría al borde de la muerte. Recuerdo la última vez en la que me metí en un lío con una banda de Akumus o como se llamen, al igual que esos llamados Deus y demás vainas. Si miro el recuento de muertos por cada herida mortal, infecciones y eso deberían ser como... Meh, a quien le importa? La cuestión era que ese tío me ha arruinado el día, sobretodo cuando uno de los civiles salió e intentó matarlo... Pfft, si ya, como si pudiera, el fácilmente lo hizo volar por los aires de forma literal y no sé si estaba muerto o inconsciente, pero eso no importaba al cabo de unos pocos segundos.

-Bueno, pos este no vive. Pero volviendo al tema! Se puede saber que demonios te ha hecho la cafetería?! Te han timado o algo como para que la destruyas?!-

Le grité furiosamente mientras apuntaba al dedo a todos los escombros que tenía por su alrededor. Y yo que solo quería un helado de fresa y una buena jarra de leche desnatada... Definitivamente no tengo mucha suerte en Sunshine... Meh, pasa lo mismo en Pandora, a quien pretendo engañar?

No podía creer que había perdido el control, pero en serio odiaba de sobremanera el hecho de mantenerse tan pasivo ante tal acontecimiento. Estaba a punto de golpearla, de hacerle lo mismo que aquel sujeto que ahora, bien podría ir camino a wonderland. Pero eso era lo de menos, había perdido los estribos y había destrozado aquel lugar sin razón aparente. Bueno, no había más que hacer que sencillamente abandonar el lugar.- Sabes, en verdad no sé de qué hablas –Dijo tranquilamente, olvidándose de aquello que había pasado, del odio y del enojo que sentía en ese instante. Todo se venía abajo si considerabas que acababa de destrozar el lugar con un simple movimiento. Al menos nadie había resultado lesionado.

Sus pies se abrían paso entre los escombros mientras el hundía mas su rostro en aquella capucha. Mientras menos contacto visual tuviese, mayor era la posibilidad de irse sin recibir un sermón ¿Verdad? Bueno, eso era lo que esperaba muy en el fondo. Tan pronto aquel ser paso al lado de la chica, justo en el instante en que se encontraba por salir de ahí, fue entonces que varios pares de pisadas se hacían escuchar en los alrededores, acompañados de un incesante gruñido por parte de una multitud. Fuese lo que fuese, nada bueno estaba por suceder.

Su mirada se dirigió instintivamente en dirección a donde los sonidos provenían, como un simple reflejo. Alcanzo el arma que tenía en su espalda, una pistola modificada para disparar al menos 10 balas. Apunto a un costado, justo en la dirección de aquella chica. Solo esperaba no errar.- ¡Muévete! –Le ordeno, esperando que esta se moviese antes de recibir aquel disparo. Sabía que algo se avecinaba, y esperaba espantar al menos a uno justo cuando estos se aproximaran lo suficiente. Al parecer, no había funcionado. Una horda de pandilleros se aproximaba rápidamente a su posición. Unos altos, otros gordos, algunos con armas y otros simplemente en motocicleta. Era oficial, estaban jodidos.

O sea... Que? Le voy diciendo un montón de cosas con un cabreo del copón, y luego pasa de largo? En serio, esto lo hace para molestarme o algo por que algo le he hecho para que se ponga de esa manera... Ay dios y luego para colmo se va como si nada, ahí tan pancho, como si nada hubiera ocurrido. El muy desgraciado se va como si a el le importara un carajo lo que ha ocurrido ahora mismo solo para ver mi reacción al verle aparecer... O sea, eso es todo lo que tenías que decirme? Con una cara de embobada que puse apenas sabía que es lo que acaba de pasar, y lo único que hice es suspirar y quejarme.

-Que demonios...? O sea, no tienes vergüenza? Madre mía... Sabes que? VALE!! Haz lo que quieras! Yo me también me las piro!-

Aun con esa rabieta de niña pequeña me fui una vez que pasó su lado, ya no quería discutir mas con ese cretino ya me daba igual todo... Hasta que de pronto el me gritó diciendo de que me mueva y entonces, oí un disparo que casi me dejó sorda.

-HUH!?-

Me di media-vuelta aún enfadada con el hasta que alguien me atravesó el cráneo con tanta fuerza que me tiró al suelo... No me acuerdo si me habían disparado mas veces o tal pero... Genial... Ahora tenía derrame cerebral por culpa de un "genio" que se la ocurrido dispararme en la cabeza. No sé lo que pasó después, ya que me quedé como inconsciente (O muerta) como 1 o 2 minutos antes de poder reaccionar ante el dolor. Supondría de que la regeneración iba a extraer la bala de mi cabeza, el resto de la regeneración, ya era cuestión de no seguir siendo un blanco fácil para los imbéciles que se atrevieron a dispararme.

-DIOS!! COMO DUELE MALDITA SEA!! Y eso que me han disparado muchas veces ahí... Pero será posible? Ahora por tu culpa tengo jaquecas! Como vas a pagar eso eh?!-

Eso es lo que grité mientras me levantaba del suelo adolorida por el dolor de cabeza que ahora mismo me habían dado, era hora de vengarme de esos desgraciados si es que me habían dejado algo para mi... O bueno, para mi chico...

[OFF: Damn it, es mas corto de lo que parece. Bueno, esperaré al siguiente a ver si lo alargo mas de lo que debe]